Violación Involuntaria

El trauma y la disociación como base de las relaciones sexuales no deseadas, pero aparentemente consentidas. 

 

Cuando pensamos en la palabra violación, la imagen mental que suele surgir es la de una agresión sexual violenta, posiblemente de un hombre hacia una mujer. Esta proyección, a pesar del sesgo de género, cumple con la definición exacta de lo que el término representa. Sin embargo, el concepto de violación es una cuestión mucho más amplia que debemos desarrollar. 

La violación se compone de un factor imprescindible que tiene que ver con rebasar los límites, con atravesar las fronteras que pueden ser propias o ajenas, físicas o psicológicas. Violar implica desprecio, desdén y una falta de cuidado profundo. Es la invasión del límite donde lo agradable o placentero desaparece para dejar paso al malestar intenso, el asco, la vergüenza, el rechazo, y tal vez el odio. Una violación es un acto de maltrato, un acto que puede ser ejercido por otro o por uno mismo.